Lectio Doctoralis – Universidad de Bari – 26 de abril de 2002

Es la primera vez que la Facultad de Economía de Bari otorga un título de Doctor Honoris Causa. La decisión de la Universidad de Bari de otorgarle el título honorífico de Doctor Honoris Causa a Geronzi se debe – conforme a lo escrito en la motivación – a su reciente actuación que ha llevado a rediseñar y privatizar el sistema bancario italiano, a una mejor consolidación internacional del mismo, al desarrollo en el Centro-Sur de un polo bancario plurifuncional capaz de mitigar los desequilibrios territoriales existentes y revitalizar la economía de todo el Mezzogiorno (la zona meridional de Italia). Y también porque “la compleja integración-racionalización llevada a cabo, fruto de la intuición y la intensa actividad de Cesare Geronzi, está acompañada del desarrollo de una colaboración particular con el mundo universitario, mediante la realización de proyectos formativos de investigación, consagrados a aplicar las mejores técnicas de gestión y soluciones tecnológicas para la dirección de la empresa”. Conforme a las contribuciones aportadas – concluye la motivación – merece un reconocimiento particular la constante coherencia entre el posicionamiento de su pensamiento, vinculado a un conocimiento pleno del mecanismo de funcionamiento de la empresa bancaria, y su comportamiento como banquero firme y clarividente”.

El Sr. Geronzi, en calidad de Presidente de la Banca di Roma, al leer su lectio doctoralis, ha precisado que un “punto fuerte del nuevo grupo será el modelo de negocio multicanal consagrado a aumentar las cuotas de mercado a través de las oportunidades de venta cruzada de productos y servicios a la clientela y una fuerte inserción en las áreas de negocio con mayor crecimiento”. – Finalmente – concluye su lección diciendo - “Un funcionamiento excelente y, sobre todo, el “éxito” de una empresa se consigue únicamente si el comportamiento de todos sus sujetos refleja, en cierta medida, valores diversos de la simple utilidad, del egoísmo individual. Valores que, explícita o implícitamente, se insertan en la categoría de la ética. El directivo, el banquero, por las responsabilidades que derivan de las “características específicas” de la banca, por la libertad y la autonomía de juicio, por la fuerte implicación de hombres y recursos en sus elecciones, se debe sentir, más que otros, comprometido con la dimensión ética de su actuación”.